Por Raúl A. Pinto
La policía de la ciudad de Saskatoon, en la provincia de Saskatchewan, respondió de manera rápida el pasado fin de semana a varios llamados por sospechas de sobredosis con cocaína mezclada con fentanilo, que finalmente cobraron dos vidas durante el fin de semana que resultaron en dos muertes.
Los oficiales tomaron la inusual medida de dar de manera pública la dirección y el contacto telefónico de dos sospechosos de traficar drogas, intentando evitar más muertes. Debido a esto se logró el arresto de tres personas fueron arrestadas.
Saskatoon Police Service afirmó haber respondido a por lo menos seis sospechas de sobredosis el sábado 10 de marzo. Se reportó que un hombre y una mujer perdieron la vida mientras que otra persona se encuentra en coma.
Tres personas de sexo masculino, todos de fuera de la provincia, se encuentran bajo custodia policial desde el lunes, por cargos por tráfico de drogas y posesión ilegal de armas. El oficial Dave Haye dijo a la prensa que se está pensando ‘seriamente” en presentar cargos por homicidio.
“Creemos que los intereses de seguridad pública son de mayor necesidad aquí y es por eso que lanzamos esa información”, dijo Haye.
Ante la urgencia del caso, la policía emitió una advertencia de seguridad pública, anunciado a la población que la cocaína estaba siendo comprada a un presunto comerciante apodado “Lil Joe” o “Joe Bro” además de anunciar que el número telefónico era el 306-881-7300. En la advertencia se decía que la droga proporcionada por esta persona posiblemente estaba contaminada con fentanilo.
El Premier de Saskatchewan Scott Moe dijo que la provincia necesita continuar esforzándose para evitar nuevas sobredosis, señalando que “es algo que debe ser una prioridad a medida que avanzamos para garantizar que nuestras comunidades más vulnerables tengan acceso al profesional de salud adecuado lo antes posible y reciban la ayuda perfecta tan pronto como sea posible”.
El aviso de la policía instó a todos los que habían comprado cocaína a este dealer a llevarla a la estación de policía para su eliminación segura, sin riesgo de enfrentar cargos de posesión. Have dijo que las personas adictas “necesitan tratamiento y no cargos criminales”. Además, se informó que la sustancia naloxona, que podría ayudar a revertir los efectos de una sobredosis, estaban disponibles para llevar de manera gratuita.
